28.5.11

Niños Indigo: Una Doctrina contra - educativa y pseudocientífica

Carlos A. Quintana

Resumen: Se discute el fenómeno pseudocientífico de los Niños Índigo sobre la base de la bibliografía de sus principales exponentes. Se describe y fundamenta que quienes siguen esta doctrina pueden causar perjuicios a la salud de los niños, y que el concepto de Niños Índigo tiene un componente racista que promueve la discriminación. Los fundamentos de su existencia consiste en conceptos metafísicos New Age, supuestos contactos con extraterrestres y otras fuentes igualmente falsas, imposibles de poner a prueba o refutadas. Sus promotores son cultores de diversas pseudociencias (entrenadores en Programación Neuro Lingüística, terapeutas transpersonales, naturistas, radiestesistas, "investigadores" paranormales, espiritualistas, etc.) o profesionales ajenos a la medicina (cantantes, profesores de idioma, profesoras de cerámica, maestras jardineras, etc.). Se alerta acerca del intento de incluir esta pseudociencia en el sistema educativo en Argentina, usando una versión menos fantasiosa pero igualmente falsa y discriminatoria. Se concluye que los Niños Índigo no existen como una entidad concreta de la realidad biológica humana.
Los Niños Índigo, Niños de Luz o Niños de Gracia es una de las tantas ramificaciones de la corriente pseudocientífica New Age que se presenta como una alternativa para vivir en un mundo mejor. Sin embargo, en torno a la filosofía de los Niños Índigo trasciende un peligroso mensaje mesiánico contra la medicina, promueve la existencia de seres extraterrestres y sostiene una nueva forma de racismo. La idea de los Niños Índigo fue inventada en 1982 por la parapsicóloga Nancy Ann Tappe, que se presenta como terapeuta o espiritualista. En su libro "Entendiendo su vida a través del Color" propuso una clasificación de las personas según el color de su aura, una actualización New Age del perverso e igualmente refutado sistema de razas humanas que tanto daño hizo a la humanidad. Este fraude creció en importancia a partir de un libro "Los Niños Índigo" de Lee Carroll y su esposa Jan Tober, que en textos posteriores hicieron mayor énfasis en que se comunican telepáticamente con una entidad extraterrestre que les enseña acerca de estos nuevos seres. Este libro, en el que N. Tappe tiene una participación destacada, se compone de numerosos capítulos cortos escritos por diversos "profesionales" y "especialistas" que aconsejan cómo se debe tratar a un Niño Índigo.
Gran parte del texto son consejos útiles para la crianza de cualquier niño, del tipo:

"Los niños necesitan seguridad, atención, respeto, dignidad y un lugar seguro". "No los golpee o use lenguaje ofensivo"."Deje que sus emociones le muestren amor". "Mantenga su palabra".

Estos consejos son comunes en conferencias y cursos sobre NI, pero la pregunta que le surge al lector es que no son únicos para un supuesto tipo nuevo y exclusivo de niño que, por su supuesta diferencia, requiere de cuidados distintos. Entonces, ¿los demás niños no requieren seguridad y respeto? ¿podemos golpearlos y ofenderlos? ¿no debemos demostrarles amor? ¿podemos engañarlos? Otras sugerencias son perniciosas, ya que promueven un trato diferencial en la educación, en la alimentación, el trato diario y en el cuidado de la salud.

¿Qué es un Niño Índigo?Para que se pueda definir un conjunto distinto del resto en la población humana deben existir características objetivas y propias que identifiquen a los individuos que ingresan a esa categoría. Esas características deben ser únicas de esa población humana, es decir no compartidas por el resto de la humanidad. Además, para definir esa categoría debe existir un correlato genético o cultural que lo sustente. Por ejemplo, los menonitas o la etnia Nukak tienen características culturales distintas al resto de las personas, por lo que se pueden sustentar como grupos culturales propios. Biológicamente no se conocen categorías que puedan servir de fundamento para proponer grupos distintos dentro de la humanidad.
Las numerosas definiciones de Niños Índigo, además de ser diferentes entre sí, son subjetivas o están fundadas sobre caracteres esotéricos o sin referentes materiales en la realidad. Sólo Nacy Tappe se atrevió a plantear una definición clara: ella usó el color del aura. El problema de esta definición es que no se puede caracterizar a una entidad de la realidad, como sería una nueva clase o raza humana, con un concepto metafísico y pseudocientífico. El aura supuestamente es un reflejo de una "energía" sobrenatural o energía vital que en los humanos emergen desde los chakras, y se vincula con la reencarnación. Estas afirmaciones nunca pudieron ser comprobadas a través de la experimentación científica o validada con algún método, es decir, el aura sólo existe en la imaginación. Ver "Desde el alma: La fotografía Kirlian" para una discusión más detallada sobre el significado del aura.
Todos los demás autores sólo ofrecen características generales y ambiguas.
Como ejemplo de estas vaguedades y generalidades se puede citar la propuesta original de Carroll y Tober en "Los Niños Índigo":

1.-Vienen al mundo con un sentimiento de realeza (y con frecuencia actúan de esa manera).
2.-Tienen un sentimiento de "merecer estar aquí" y se sorprenden cuando otros no comparten esta idea.
3.-La propia valía no es un asunto de gran importancia. Con frecuencia ellos les dicen a los padres "quiénes son ellos".
4.-Tienen dificultad con la autoridad absoluta (autoridad sin explicación o alternativa).
5.-Hay cosas que sencillamente no pueden hacer; por ejemplo, les cuesta mucho trabajo esperar en una fila.
6.-Se frustran con los sistemas que se basan en la costumbre y que no requieren un pensamiento creativo.
7.-Con frecuencia ven mejores maneras de hacer las cosas, tanto en la casa como en la escuela, lo cual los hace parecer inconformes con cualquier sistema.
8.-Parecen antisociales a menos que estén con los de su propia clase. Si no hay otros con una conciencia similar alrededor de ellos, con frecuencia se vuelven introvertidos, sintiendo que ningún otro ser humano los entiende. La escuela les resulta con frecuencia extremadamente difícil para socializar.
9.-Estos niños no responderán a la disciplina "de culpa" ("Espera a que llegue tu papá a casa y vea lo que has hecho"). 10.-No les da pena dejar saber cuáles son sus necesidades.

Otras definiciones, o enumeraciones de rasgos, de los Niños Índigo son de este estilo, y se reiteran en usar la idea de Carroll y Tober que dice:

"Un Niño Índigo es aquel que muestra una nueva e inusual serie de atributos psicológicos así como un patrón de comportamiento generalmente no documentado con anterioridad".

Aunque estos autores presentan esto como si fuera una definición, en realidad no pasa de un anuncio: no aclaran expresamente cuáles son los "atributos psicológicos" nuevos e inusuales, ni cual es el "patrón de comportamiento" indocumentado.
Nancy Tappe fue más allá de su definición inicial, llegó a definir cuatro tipos distintos de Niños Índigo: el humanista, el conceptual, el artista y el interdimensional. Nuevamente definidos con generalidades para que cada uno pueda hallar lo que busca en cualquier niño.
Luz Guzmán en su libro "Los Niños Índigo, en busca de la verdad" describe 76 características de estos niños, algunas tan generales como "56. Son Inquietos", tan pseudocientíficas como "50. Canalizan sin esfuerzo", o "54. Manifiestan otras habilidades parapsicológicas".
Revisando revistas científicas de medicina pediátrica como el Journal Pediatry Health Care, The Electronic Journal of Pediatric Gastroenterology, Nutrition and Liver Diseases, Le Journal de Pediatrie et de Puericulture, el European Journal of Pediatry, el Journal of Pediatry y otros similares, no existe un solo estudio sobre la existencia de Niños Índigo o de algún fenómeno similar que le pueda ser referido aunque sea por una aproximación grosera. Es decir los profesionales que todos los días tratan a decenas de niños desconocen una manifestación tan destacada como la que nos relatan Tappe, Carroll y Tober desde hace 20 años.
En síntesis: los Niños Índigo no existen como una categoría objetiva de la diversidad humana, no se los puede definir ni diferenciar inequívocamente de otras personas ya sea desde un aspecto cultural o biológico y en el ámbito científico especializado nunca se detectó esta supuesta nueva categoría humana.

El componente racista
Los tres autores originarios de Niños Índigo (Tappe, Carroll y Tober) son los que le dieron más empuje a esta idea, todos los demás se basaron o inspiraron en ellos para tratar el tema. Con la diversificación de autores, libros, conferencias y páginas de internet las experiencias aumentaron en volumen y profundizaron esta fantasía, incluyendo sus aspectos más dañinos en el plano social. Por ejemplo la autora venezolana Isabel Stelling en su artículo "Una nueva raza esta emergiendo (Partes 1 a 4)" (ver
http://www.ninosdegracia.com/index_nindigos/nueva_raza.htm) abunda en afirmaciones como:
"Nuevos niños, o más bien súper-niños están naciendo en el planeta." "Estos niños extraordinarios o súper-niños, llamados los Niños de la Vibración Cristal o los Niños del Milenio y que conforman una nueva raza en el planeta, fueron denominados Niños Índigo por la escritora norteamericana Nancy Ann Tappe, ...".
Su mensaje racista queda evidenciado todavía más claramente cuando afirma:
"... los Niños Índigo forman parte de una nueva raza que podríamos llamar "La Raza de los Superhombres", seres superdotados y superinteligentes pero además revestidos con altos grados de espiritualidad, honestidad e integridad, características que traen impresas en su ADN, ..."."Todos estos niños son, aparentemente, producto de la mutación genética, y se determinó que la estructura de su ADN es diferente al resto de los seres humanos. Tienen 4 ácidos nucleicos combinados en grupos de tres a tres que producen 24 codones, 4 codones más que el hombre corriente."
Esto último es otro absurdo ya que si su ADN es distinto al humano los Niños Índigo no serían humanos ni podrían nacer de seres humanos. Además, la autora desconoce lo básico de la estructura del ADN y del código genético ya que las combinaciones de los codones son 64 en lugar de 20, mientras que los ácidos nucleicos son dos y no cuatro.
En otro artículo ( "El Paradigma de la Nueva Raza" ), I.. Stelling expresa:
"... los Niños Índigo, un nuevo paradigma para la humanidad, una nueva raza que habrá de repercutir en nuevos paradigmas educacionales, políticos, sociales, religiosos y que también incidirá directamente en nuestro sistema de creencias."
(http://www.ninosdegracia.com/paradigma02.htm )
Otros autores usan una terminología más sutil aunque igualmente discriminatoria: por ejemplo Richard Seigle (capítulo "Sistemas de Clasificación Humana" en el libro "Los Niños Índigo" ) afirma que es posible caracterizar grupos humanos por el color, mientras que son comunes referencias como
"los nuevos niños superpoderosos", "son más inteligentes y más sensibles","los niños del nuevo milenio" (desprovisto de su concepto cronológico),"los nuevos niños","los niños de hoy son diferentes", etc. Otros expresan que los Niños Índigo tienen una notable inteligencia, mayor creatividad, una base genética más perfecta que la de un humano y hasta poderes paranormales como telekinesis (mover objetos sin tocarlos) y telepatía (transmisión de pensamientos). También abundan expresiones como "Los Índigo procesan sus emociones de forma diferente a los no-Índigo ..." o "No sienten temor". Algunos "indigólogos" parecen desconocer los conceptos básicos de la diversidad humana al sostener que son más bajos, o más altos, etc., o que:
"Pueden tener un ligero abultamiento del lóbulo frontal. Son de ojos grandes y de contextura ósea fina, por lo que, generalmente, son delgados" (www.mantra.com.ar/miv/foro/mensaje/802.html)
También es común leer que "su superioridad genética les confiere un sistema inmunológico más fuerte de modo que no se enfermarían nunca". Sin embargo los pediatras no han detectado una disminución en las consultas médicas ni en las enfermedades de los niños, aun cuando N. Tappe expresa que "El 90% de los niños de 10 años de edad son índigo (en 1998)". Semejante cantidad de niños inmunes debería ser evidente. Es de resaltar que toda vez que se puso a prueba la existencia de razas humanas nunca se pudo demostrar su existencia, ya sea por la morfología externa o del esqueleto, la composición macromolecular, los cariotipos o la conformación genética. Todos los autores que afirman que los Niños Indigo "son diferentes" jamás presentaron una sola evidencia más allá de su anuncio, inclusive algunos pocos que citan "investigaciones en la Universidad de California" en informes que nunca aparecen.

El componente extraterrestre y New AgeIsabel Stelling en "Kryon y los Niños Índigo" (ver este artículo en www.cultivaelespiritu.com.ar/ninos/Índigo.htm), sintetiza esta faceta de la historia:
"Gran parte de la información acerca de los Niños Índigo fue transmitida telepáticamente o canalizada por una entidad, nunca encarnada en la Tierra, que se llama Kryon."; "Kryon es una gentil y amorosa entidad que se encuentra actualmente en la Tierra desde el año de 1991, para ayudar a movernos hacia la alta energía de lo que llamamos "La Nueva Era"."
El colmo del absurdo, y que hace pensar si esto no se trata de una gran broma, se evidencia cuando Stelling, y otros, nos cuentan que todas las comunicaciones telepáticas comienzan diciendo "Yo Soy Kryon, del Servicio Magnético". En otras publicaciones, además, parece que Kryon es Maestro de ese servicio. En diversas páginas de internet se pueden leer las "canalizaciones" de Kryon a través de Lee Carroll, como "Activando la tercera capa del ADN" o "El círculo de la Energía" (ver
www.cultivaelespiritu.com.ar/kyon/lee.htm). Según la "canalizadora" Nancy Tate, Kryon le habla acerca de la "civilización perdida de la Atlántida". En "Los Niños Índigo" N. A. Tappe afirma:
"Algunos ya han pasado por la tercera dimensión y hay otros, me parece, que vienen de otro planeta. Son los índigo interplanetarios, por eso los llamo interdimensionales." Con el condimento de Nueva Era se diversificó la potencialidad de autores y consejos acerca de estos supuestos niños. Se cuentan desde dietas naturistas especiales para ellos (aunque no son diferentes a las de otras personas), y se hace una permanente adaptación del léxico New Age para este caso: Vidas pasadas, Karma, Aura, Medicina Alternativa, Vibración, Energía, Telekinesis, Telepatía, Trabajador de la Luz, Chakra, Reiki, la Atlántida, etc. Los relatos de este tipo son numerosos, y como en el resto de los enfoques sobre los Niños Índigo carecen de toda evidencia objetiva o posibilidad de verificación. A pesar de ello siempre se hace hincapié en que se trata de niños diferentes al resto. Nuevamente Isabel Stelling asombra con sus afirmaciones en "Habilidades Parapsicológicas en los Niños Indigo" (ver el artículo en http://conates.tripod.com.ve/ninos_indigo/istelling/nisuperhacmila.html): en este texto la autora logra mezclar la mecánica cuántica, la Biblia, telescopios, microscopios y la parapsicología entre otros temas. Allí relata como ciertas las siguientes habilidades de los NI:
-poderes súper especiales, -telekinesis, -clariaudiencia, -clarividencia, -"leer un papel escrito cuando lo colocas en su oído o con solo tocarlos", -"ven seres de otras dimensiones ", -telepatía, -viajes astrales, -sanación espiritual, entre otras.
Además de los NI, en los círculos ufológicos y New Age se están anunciado otros "niños" que estarían apareciendo en nuestro planeta. Ya no es Kryon el que se comunica telepáticamente con los "canalizadores", sino directamente la Virgen María (ver "Criando Cristales"
http://www.cultivaelespiritu.com.ar/ninos/indigo.htm) o El Grupo (una supuesta colectividad de ángeles que le dan información a Steve Rother). Las características de estos niños son todavía más ambiguas, subjetivas e indefinidas, ya que no se trata de niños súper inteligentes (que al crecer se verifica que carecen de esta singularidad). Algunos de ellos son:
-Niños Cristal, también llamados niños de la Nueva Tierra, Niños Psíquicos o Niños de las Estrellas: serían más sensibles, extremadamente poderosos y sensitivos. -Crystal Scauters: vendrían del espacio a examinar el agua y sembrar semillas. -Niños Diamante: tendrían aura en forma multicolor. -Niños Platino: serían similares a los cristal pero pueden existir en dos dimensiones a la vez; tienen aura con rayos luminosos entre amarillo y blanco. -Crystals Walkins: encarnarían como adultos con vibración de cristal. -Crystal Erders: algunos serían humanos. -Niños Súper Psiquicos de China: serían niños que sólo nacen en ese país y tienen poderes paranormales.

El componente sanitario
Como se mencionó más arriba, un aspecto que se usa para defender la idea que los Niños Índigo existen es que su salud es superlativa. También quedó establecido que esto es falso, ya que no resiste la más mínima prueba de verificación. Además de la vertiente discriminatoria este asunto puede poner en riesgo la salud de los niños con una patología bien conocida y largamente estudiada: el Síndrome del Déficit de la Atención e Hiperactividad (SDAH). El reconocimiento de que un niño es índigo puede traer aparejado dejar de lado el tratamiento médico de un desorden neurobiológico, lo que puede ocasionar consecuencias graves. Este es el factor por el cual muchos padres encuentran una excusa, hasta cierto punto comprensible, al negar que su hijo tiene un problema de salud que, para muchos, significa que tiene una enfermedad mental. Las patologías del cerebro suelen tener una alta carga emocional en la familia, lo que puede interferir con la capacidad de tomar decisiones correctas. Así, es preferible creer que nuestro hijo es un ser especial y superior que aceptar que son parte del 3 al 5% que sufren de hiperactividad. Sin embargo, desde el año 1950 el SDAH tiene un tratamiento altamente contrastado con buenos resultados. Pero las revelaciones celestiales de Kryon y su oportuna publicación coinciden con una campaña en Estados Unidos contra el uso de medicamentos, promovida por terapeutas no médicos, angeólogos, naturistas New Age, parapsicólogos y otros mercaderes sin escrúpulos. Así, para muchos padres con hijos hiperactivos puede ser más valioso un "testimonio" o anécdotas vagas y sin corroboración que 40 años de experiencia de un tratamiento médico específico y exitoso. Desde la página "Niños Índigo" (conates.tripod.com.ve/ninos_indigo/id15.html) se argumenta en contra del tratamiento médico del SDAH. Luego de transcribir el prospecto de una droga específica de uso común para esta dolencia, aconsejan:
"Después de leer la ficha ustedes se preguntarán: ¿Entonces que opciones tengo? Buscar ayuda en la medicina alternativa, médicos homeopáticos, quánticos, o terapeutas flores de Bach."
Es decir todo fuera de la medicina. Otros "indigólogos" cuestionan el tratamiento médico con malas artes similares, como José Piedrafita Moreno en
www.geocities.com/elclubdelosninosindigo/Ritalin.html que, siendo cantante lírico, opina sobre el tratamiento de una dolencia neurológica. La supuesta inmunidad a las enfermedades de los Niños Indigo puede ser un incentivo para que los padres dejen los cuidados elementales de la salud, como el plan de vacunación, o cambiar el cuidado médico de sus hijos por el de una pseudomedicina.

Los Niños Índigo en la escuela

Principio 10: El niño debe ser protegido contra las prácticas que puedan fomentar la discriminación racial, religiosa o de cualquier otra índole.
Declaración Universal de los Derechos del Niño.

La idea de NI llega incluso al ámbito escolar, en el que docentes con escasa formación en ciencias y alta credulidad, creen poder identificarlos entre sus alumnos. Un docente que aplica una pseudociencia para clasificar a sus alumnos como parte de una "raza superior", además de perder su capacidad para diferenciar lo falso de lo verdadero, está vulnerando derechos básicos de los niños al mismo tiempo que pone en serio riesgo su salud. En diversas partes del mundo funciona el Proyecto Índigo Internacional que se autodefine como "un Movimiento Internacional, sin fines de lucro, creado y orientado para brindar asistencia, información, formación docente y educativa a padres, maestros, psicólogos, pediatras, entre otros, de niños con Déficit Atencional y/o Hiperactividad. Conocidos internacionalmente, hoy, como Niños Índigo". Esta es la avanzada internacional que pretende penetrar en el sistema educativo ya que sus principales acciones son cursos y talleres para padres y docentes, como:
-"Quienes son los Nuevos Niños", -"Formadores Índigo", -"Niños Índigo: Taller de Educación", -"Programa Especial Para Educadores y Colegios", -"Herramientas Para La Nueva Educación - Taller Vivencial", -"Niños Índigo, Educar en la Nueva Vibración".
Sus docentes no son médicos, psicólogos, psiquiatras o pediatras, sino entrenadores en Programación Neuro Lingüística, terapeutas transpersonales, naturistas, radiestesistas, "investigadores" paranormales, espiritualistas, cantantes líricos, profesores de idioma profesoras de cerámica o maestras jardineras.
En Argentina esta doctrina pseudocientífica se está implantando en el sistema educativo de nivel inicial. Las instituciones que lo facilitan son, al menos, la Asociación Marplatense de Educadores de Nivel Inicial (AMENI) y la Unión Nacional de Asociaciones de Educadores de Nivel Inicial (UNADENI) que promociona la existencia de Niños Índigo a través de su apartado "Material de Consulta". En éstos ámbitos se advierte una estrategia transformada que consiste en dar una versión de los Niños Índigo adaptada al grado de "credulidad" presumible en el público. Las referencias esotéricas o new age son más sutiles, no se recurre al libreto extraterrestre, pero se mantiene la premisa de la existencia de niños diferentes y de características superlativas. Esta adaptabilidad es alarmante, ya que se trata de una metodología para conquistar voluntades y demuestra que hay dos relatos: uno para convencidos, con todos los condimentos, y otro para público general. En el propio Proyecto Índigo Internacional ya se vislumbra este engaño cuando se usan como sinónimos Niño Índigo y niños con Déficit Atencional y/o Hiperactividad.

Referencias Bibliográficashttp://www.kryon.com/ : es el sitio oficial del maestro del Servicio Magnético.http://www.cultivaelespiritu.com.ar/ : es un sitio en español con abundante bibliografía de la versión sin censura del tema, hay numerosas "canalizaciones" de Kryon o de la Virgen María.http://www.unadeniargentina.com.ar/material/chicosindigos.htm : sitio de la Unión Nacional de Asociaciones de Educadores de Nivel Inicial (UNADENI) de Argentina, informa a los docentes acerca de la existencia de NI, en el mismo apartado que presenta la Declaración Universal de los Derechos del Niño.

"Los Niños Índigo", libro de Lee Carroll y Jan Tober, 2001, Barcelona. Ediciones Obelisco.http://www.ninosdegracia.com/ : sitio de Isabel Stelling con numerosos artículos.www.geocities.com/orlando_pla_riera : Libro de Luz Guzmán "Los Niños Índigo en busca de la verdad".http://www.geocities.com/radiestesiapr : sitio "Radiestesia Puerto Rico", se ofrecen servicios de lectura del aura, venta de elementos de radiestesia e identificación de Niños Índigo.

En librerías y en internet usted podrá hallar numerosa bibliografía acerca de la supuesta existencia y supuestas características de los Niños Índigo.

http://www.skepdic.com/indigo.html : el Diccionario Escéptico de Robert Carroll, brinda una síntesis muy informativa del fraude índigo.

http://www.geocities.com/escepticosvenezuela : sitio de la Asociación Racional Escéptica de Venezuela, en el Boletín Lucido Nº 10 el artículo "Niños Índigo ¿Realidad o Ficción?" es de los pocos que analizan este fenómeno de modo racional.

http://www.asalup.org/ : sitio de la Asociación Argentina de Lucha contra las Pseudociencias, en su FAQ se cuestiona la idea de Niños Índigo.El Escéptico Digital, Boletín electrónico de Ciencia, Escepticismo y Crítica a la Pseudociencia Edición 2004 - Número 08 - 4 de mayo de 2004.

http://digital.el-esceptico.org/ : "El Fraude Sobre Los Niños Indigo" Por Pablo Allegritti.
"La Nueva Era", libro de Alfredo Silletta, 1994. Si bien este libro no trata a los Niños Indigo, da un panorama muy claro del proceder de cómo los new agers usan a los niños como un blanco de su comercio y su doctrina. Se puede consultar completo en
www.sectas.org.ar/newage0.html

Artículo publicado originalmente en:
ASALUP

Este artículo fue republicado total o parcialmente en:
Aasociación para la Difusión del Pensamiento Racional (ADePENSAR)
http://ar.geocities.com/adepensar

Sectas del nuevo milenio (Página de Alfredo Silletta)http://www.sectas.org.ar/indigo.htm



25.1.11

Niño! deja ya de joder con el aura...

Por Lola (del blog Provocando el Seso)

Daniel: mamá, tengo que hacerme esa foto donde se ve el color de mi aura

Lola: que tonterías dices Daniel, ya te conté que la historieta del índigo obedece a una pseudociencia inventada por esa loca norteamericana

Daniel: ya mamá pero mi hermano ( 6 años , hijo de su padre) insiste en que mi aura es negra, que soy malo, que desprendo negatividad y su madre lo confirma alegando que un psicólogo diagnostico a mi hermano con poder para ver auras como índigo, por su coeficiente…

A partir de aquí, busco información documentada para explicarle a Daniel el fraude de esta vieja historia que por lo sucedido aún está dando por…en Canarias , esto durará todo el tiempo que tengan de vida las lisiadas neuronas de los imbéciles .

1 La verdad sobre la foto. Se llama Kirlian por su descubridor.

Las fotografías Kirlian son verdaderamente asombrosas. O al menos asombrosamente bonitas. Alrededor de los objetos "kirlianografiados" (vaya palabreja) se ve claramente energía, relampagueantes rayos con atractivos colores que rodean al objeto fotografiado... ¿cómo puede alguien dudar que lo que se está fotografiando es energía? 

Caramba, si hasta parece electricidad. 

¿Será porque es electricidad? 

¿Acaso el cuerpo humano "tiene electricidad"? 

Pues no. 

Es que, para tomar una fotografía Kirlian, se dispara sobre el sujeto y sobre la placa fotográfica una descarga eléctrica de elevadísimo voltaje y baja potencia (o amperaje). 

Y los tarados se asombran de que la electricidad se vea en las fotos y que, para remate, parezca electricidad. 

¿Qué esperaban? ¿Paisajes impresionistas? 

Cuando le cuentan a usted la bonita fábula de las fotos Kirlian, las cámaras Kirlian, la kirliangrafía o cualquier nombrejo que se les ocurra para sonar más esotericones, generalmente los chupapitos omiten este pequeño detalle: la "cámara" es una placa conectada a un transformador llamado "bobina de Tesla", sobre la que se pone la película o papel fotográfico y encima un vidrio sobre el que se pone el objeto a kirlanografiar. Se dispara la corriente eléctrica y voilá, tenemos una foto del disparo eléctrico. 


Y es que si cuentan que se aplican decenas de miles de voltios para tomar la foto asombrosa, el asombro disminuye. Vaya, el que se asuste de esto es porque nunca ha visto un relámpago. Los seres humanos astutos (y no sujetos a tratamiento siquiátrico intenso, internados en una celda acolchonadita y con una camisa de mangas largas, largas) saben que las descargas eléctricas se ven. Eso que ni qué. 

En el caso de las fotografías Kirlian, lo que se ve en las fotos es el efecto llamado "de corona"o aura, que se define según la facultad de ingeniería de la Universidad Nacional de la Plata como "el conjunto de fenómenos ligados a la aparición de conductividad de un gas (aire) en la proximidad de un conductor sometido a alta tensión". 

O sea, tenemos una placa fotográfica que registra luz visible (y parte de la luz no visible), tenemos un conductor (el objeto que se pone sobre la placa fotográfica) y tenemos alta tensión (mínimo 10 mil voltios, pero se ve más bonito y apantallatontos con unos 25 mil o 40 mil voltios). Alrededor del conductor sometido a alta tensión, el aire se vuelve conductivo y provoca descarga .

2 Los niños índigos

La influencia social de la Nueva Era no es un factor despreciable cuando se trata de envolver con su edulcorada mitología aspectos vitales de la sociedad. Recientemente ha surgido un concepto creado por parasicólogos y aprovechado por escritores de best sellers, conocido como “niños índigo", una especie de mesianismo esotérico que atribuye a estos niños la categoría de nueva raza superior, “con un alto potencial intelectual y una nueva conciencia interna” destinada ni más ni menos que a salvar el mundo “rompiendo los antiguos esquemas sociales que atan a la humanidad para lograr mediante su transformación abolir la infelicidad en la Tierra”. Contra toda sensatez, esta idea está despertando entusiasmo en ciertos círculos de la psicopedagogía. Grupos cada vez mayores de educadores y sicólogos infantiles se han plegado a este tipo de ideas, sin sentarse a analizar si se trata de un fenómeno científicamente comprobable, de una nueva creencia dentro del mundo de lo paranormal y espiritual, o si simplemente es un negocio más, basado en la necesidad de creer que somos especiales y en la explotación del orgullo de los padres para con sus hijos.

ORIGEN DE LA IDEA

El termino “índigo” fue inventado en 1982 por Nancy Ann Tappe, una parasicóloga que desarrolló un sistema para clasificar la personalidad de las personas de acuerdo a al color de su “aura”. Según ella, las auras han estado saliendo y entrando de la Tierra a través de la historia, pero las de color índigo comenzaron a aparecer en los años 1980 y su número aumenta rápidamente.

Pero no fue sino hasta 1999 cuando apareció un libro titulado “Los Niños Índigo”, cuyos autores, Lee Carroll y Jean Tober, popularizaron la idea de una nueva generación espiritual de características especiales, destinada a mejorar el mundo. Este libro se originó sobre la base de relatos de “extraños” comportamientos por parte de niños, reportados por maestros y sicólogos que asistieron a sus seminarios. Así, describieron presuntos atributos sicológicos “poco usuales” y patrones de comportamiento “no documentados con anterioridad”. El libro no es más que una colección de ensayos y entrevistas a “expertos” en la materia, principalmente personas dedicadas la “sanación espiritual”, “canalizadores” (modernos mediums espiritistas), “terapia de ángeles” y “terapias alternativas”.

Según los autores, los patrones de conducta distintivos de los niños índigo son:

• Llegan al mundo sintiéndose reyes, y a menudo se comportan como tales.

• Tienen la sensación de merecer estar donde están, y se sorprenden cuando los demás no la comparten.

• No tienen problemas de valoración personal, a menudo le dicen a sus padres quiénes son.

• Les cuesta aceptar la autoridad que no ofrece explicación ni alternativa.

• Se niegan a hacer ciertas cosas, como por ejemplo esperar en una fila.

• Se sienten frustrados con los sistemas ritualistas que no requieren un pensamiento creativo.

• A menudo encuentran formas mejores de hacer las cosas, tanto en la casa como en la escuela.

• Parecen ser antisociales, a menos que se encuentren con personas como ellos.

• No reaccionan ante la disciplina de la culpa.

• No son tímidos para manifestar sus necesidades.

Es fácil darse cuenta de que todas estas características son demasiado ambiguas y comunes en niños pequeños como para definir un patrón especial, y muchas de ellas, como se verá más adelante, describen parcialmente el comportamiento de niños con Síndrome de Déficit de Atención e Hiperactividad (SDAH). Sin embargo, algunas conductas atribuidas a estos niños, que incluyen comportamiento antisocial, problemas de autoridad, egoísmo, etc., describirían fácilmente a un delincuente en potencia. Entre otras características atribuidas a los niños "índigo" se cuentan una inteligencia y creatividad superiores, sistemas inmunológicos “mejorados”, y hasta atributos paranormales.

Todo esto señala perfectamente las peligrosas implicaciones del concepto de los niños índigo. La idea de predestinación, de vana superioridad, de libertad absoluta y falta de respeto por la sociedad, serían las consecuencias más dañinas si este enfoque llega a penetrar la sicología educativa actual. Si bien el autoritarismo excesivo es contrario a una educación adecuada, el otro extremo es tanto o más peligroso, redundando en la alienación y frustración casi segura de grandes números de estos niños, adolescentes y adultos, al descubrir que en realidad son tan ordinarios como cualquiera de nosotros.

Sin duda, la afirmación más extraordinaria es que esta nueva “raza superior” está provista de un sistema inmunológico mucho mejor dotado, que impide que enfermen en lo absoluto. Si en efecto estos niños son una “nueva raza biológica” además de espiritual, tal sería una excelente prueba de su existencia y origen especial.

La única mención hallada de un caso particular (aunque sin referencia bibliográfica específica) es acerca de las presuntas pruebas realizadas en una fecha que no se especifica en la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA), donde supuestamente se expusieron células de niños índigo (tampoco se especifica qué tipo de células: piel, sangre, etc.) a virus del SIDA y células cancerígenas (no se especifica de qué tipo), “las cuales no afectaron en modo alguno las células de los infantes.”

Ante tan trascendental descubrimiento en la historia de la medicina mundial, buscamos en la página web de la referida universidad, pero no se pudo encontrar referencia alguna relativa a este pretendido experimento, o siquiera alguna reseña sobre los niños índigo. Tampoco se encontró ninguna referencia de tan extraordinarios resultados consultando las páginas web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE.UU. (U.S. National Library of Medicine) y los Institutos Nacionales de Salud (National Institutes of Health), las cuales contienen referencias y resúmenes de investigaciones publicadas en 4.600 revistas biomédicas en el ámbito mundial. Un descubrimiento de esta importancia no hubiera pasado desapercibido para la comunidad médica mundial y sin duda los investigadores serían merecedores del Premio Nóbel, por lo que se puede deducir sin mayores dudas que se trata de una afirmación falsa.

Dentro de las características sicológicas se atribuye a los niños índigo un desarrollo mental acelerado que les permite adquirir habilidades motrices antes de la edad respectiva, y por lo mismo su inteligencia es muy superior a la promedio. Adicionalmente se les atribuyen facultades extrasensoriales como clarividencia, telepatía, etc.

Cualquier escepticismo sobre estas afirmaciones se despejaría si se realizaran pruebas estadísticas, comparando tests de inteligencia entre niños “índigo” y comunes, partiendo del supuesto de que tengan similar alimentación, cuidado paterno y educación. Habría que realizar ensayos doble ciego* en los que se encomendaría a uno o varios “iluminados” que puedan “ver las auras” para que se elija, según su criterio, un número suficiente de niños índigo. De igual manera se seleccionaría un grupo similar de niños “no índigo”. A estos dos grupos se les aplicarían tests de inteligencia y se analizarían los resultados. En ninguna fuente de información sobre niños “índigo” se menciona la realización de este tipo de sencillas pruebas; solo se hacen simples afirmaciones sustentadas en la nada.

Con relación a las aptitudes parasicológicas, numerosos estudios científicos controlados acerca de telepatía, telequinesis, etc. han demostrado repetidamente que no se trata de fenómenos reales sino de creencias, o en la mayoría de los casos, simples fraudes.

3 Consecuencias nefastas

La idea de NI llega incluso al ámbito escolar, en el que docentes con escasa formación en ciencias y alta credulidad, creen poder identificarlos entre sus alumnos. Un docente que aplica una pseudociencia para clasificar a sus alumnos como parte de una "raza superior", además de perder su capacidad para diferenciar lo falso de lo verdadero, está vulnerando derechos básicos de los niños al mismo tiempo que pone en serio riesgo su salud. En diversas partes del mundo funciona el Proyecto Índigo Internacional que se autodefine como "un Movimiento Internacional, sin fines de lucro, creado y orientado para brindar asistencia, información, formación docente y educativa a padres, maestros, psicólogos, pediatras, entre otros, de niños con Déficit Atencional y/o Hiperactividad. Conocidos internacionalmente, hoy, como Niños Índigo". Esta es la avanzada internacional que pretende penetrar en el sistema educativo ya que sus principales acciones son cursos y talleres para padres y docentes, como:
-"Quienes son los Nuevos Niños", -"Formadores Índigo", -"Niños Índigo: Taller de Educación", -"Programa Especial Para Educadores y Colegios", -"Herramientas Para La Nueva Educación - Taller Vivencial", -"Niños Índigo, Educar en la Nueva Vibración".
Sus docentes no son médicos, psicólogos, psiquiatras o pediatras, sino entrenadores en Programación Neuro Lingüística, terapeutas transpersonales, naturistas, radiestesistas, "investigadores" paranormales, espiritualistas, cantantes líricos.

“No está demostrada la existencia de niños índigo. Está más que demostrada la existencia de padres ingenuos y mal criadores”.

2.12.10

Los niños índigo… El futuro de la humanidad en sus manos

Por Ciberprofe Roberto (de la Asociación Escéptica de Chile)

La siguiente definición es pirateada sin asco de Wikipedia:

El término compuesto 'niños índigo', se origina en el libro del año 1982 'Understanding Your Life Through Color' (Comprendiendo tu vida a través del color) de Nancy Ann Tappe, una autoproclamada psíquica y sinestésica que afirmó poseer la habilidad de percibir el aura de las personas. Según sus escritos, comenzó a notar que muchos niños estaban naciendo con auras de color índigo hacia finales de la década de 1970. A principios del siglo XXI, Tappe afirma que el 97% de los niños menores de diez años y el 70% de los que tienen entre 15 y 25 son "índigo". Sin embargo, ningún estudio científico ha conseguido comprobar sus dichos.”

En 1998, apreció el libro 'The Indigo Children: The New Kids Have Arrived (Los niños índigo: los nuevos chicos han llegado)', escrito por el matrimonio formado por Lee Carroll y Jan Tober, que popularizó esta seudociencia.

Según los textos de Tappe, Carrol y Tober estos niños privilegiados tienen dones paranormales o sobrenaturales como:

- la telequinesis,
- la clarividencia,
- la piroquinesis
- la capacidad de sanación.

Se preguntarán cómo reconocer a un muchacho que tiene un aura azul… Fácil aquí hay una lista entregada en los textos citados:

- Tiene energía en exceso (¿es hiperactivo?)
- Necesita adultos emocionalmente estables y seguros a su alrededor (¿ellos no más?)
- Puede frustrarse fácilmente porque tiene grandes ideas pero pocos recursos o personas dispuestas a ayudarle a realizarlas (¿Culpa de otros entonces?)
- Aprende fácilmente a un nivel exploratorio y se resiste a aprender de memoria o escuchando solamente (es decir, le va pésimo en la escuela pero por culpa de la escuela)
- Puede resistirse a la autoridad si ésta no está democráticamente orientada (¿Desobediente pero por culpa de las autoridades?)
- Si experimenta fracasos a edad muy temprana, pueden llegar a desarrollar bloqueos de aprendizaje permanentes. ( Es superior, pero... ¿fracasa por culpa de otros?)
- No dura mucho tiempo sentado a menos que esté absorto en un tema de su interés. (¿O sea no puede aprender?)

Estos niños que nacen creyéndose reyes (esa frase no es mía), tienen algunos problemas bastante peculiares, copiaré algunos puntos:

4. Ellos tienen dificultad en aceptar una autoridad absoluta (autoridad sin ninguna explicación o sin más alternativas). (¿Obedecer a padres, profesores, policías, jueces, gendarmes, etc.?)
5. Ellos simplemente no harán ciertas cosas; por ejemplo: esperar en una fila es muy difícil para ellos (esta es divertida… vienen a salvar el mundo pero no respetan a los que no tienen sangre azul, perdón aura azul como ellos.)
7. Con frecuencia ellos tienen mejores formas de hacer las cosas, tanto en la casa como en la escuela, lo que los hace ser como rebeldes, inconformes con cualquier sistema (sin comentario… da para mucho).
11. Tienen problemas para controlar su ira cuando algo les hiere profundamente o son testigos de injusticias (es decir que actúan mal, pero por culpa de otros).

Bien, poniéndonos serios, los escépticos tendríamos las siguientes dificultades para entender unos niños para los cuales “el planeta no está preparado”:

La primera pregunta obvia es: ¿Están seguro que existen? (Recuerdo “el dragón en la cochera” como se dijo días atrás), ¿Cómo pueden asegurarme que existen?

Otra pregunta es ¿De verdad pueden ver el aura de los niños? … ¿Lo han hecho alguna vez?. Según la teoría existen máquinas que pueden ver el aura, pero NUNCA se ha hecho este experimento. La forma de reconocer a los de “aura índigo”, es esa lista fantasiosa, ambigua e indefinida, recién leída y que depende de la observación subjetiva.

¿Han puesto una fila de 100 niños y en prueba de doble ciego han comprobado si funciona lo que afirman? Los charlatanes de esta teoría saben mucho que decir a los padres, pero nunca miden a los niños. Depende de convencer al padre para que empiece a pagar estos cursos, libros y terapias. El propio libro indica estudios científicos y cita universidades que no tienen en sus registros tales experimentos. En otras palabras toda la teoría de los niños de aura azul salió de la imaginación de esos autores.

Tal como en otras seudociencias terminan diciéndonos que es cuestión de fe. O el viejo argumento Ab Hominem atacándonos que somos envidiosos, mentes cerradas, etc. Acá la respuesta escéptica es la de siempre… Usted afirma que existe algo distinto, usted tiene la carga de la prueba (onus probandi). Haga una demostración repetible en cualquier lugar con una fila de niños placebo y niños índigos mezclados al azar sin saber cuáles son cuales (doble ciego) y con experimentos o pruebas (incluso inventadas por ustedes mismos) muestren cuales son índigos para que todos nosotros los aceptemos. Por último... muestren el aura coloreada de la que tanto hablan. ¿Es mucho pedir?

Sin embargo como todo tiene que existir una respuesta para explicarse cómo un libro tan malo, absurdo, ilógico y sin fundamentos pegó tan fuerte. Tengo mis teorías:

“Los padres trabajan más y dejan mucho tiempo a los niños solos: comiendo la chatarra que ellos quieran, viendo en TV lo que deseen, pegados al computador, sin leer textos literarios y fracasando en lo que hagan. Ese padre se extraña que el niño sea tan hiperkinético y que le vaya mal en el colegio, a pesar que gasta mucho en la cuenta del celular, TVCABLE e internet (Cómo que si el niño usara internet para estudiar…). Entonces para evitar el sentimiento de culpa, aparece este libro que le dice lo que todo padre desea escuchar.
- El niño es especial y le va mal por culpa de los otros niños, profesores, vecinos, la nana, y los mayores que no saben seguirle la corriente igual que los padres.”
- Vivimos en un mundo mágico donde el niño tiene la suerte de nacer azul sin tener que esforzarse.
- Todo es cuestión de gastar dinero en informarse con libros y charlas. Tolerarle que se salte su turno, tenga pataletas, se crea monarca, etc., sin pasar rabias ni preocuparse… total es “índigo”. El problema es de los profesores y compañeros que no respetan su privilegio de nacer con sangre azul… digo aura azul.

Ahora bien, tal como en otros casos de charlatanes y seudociencias, donde alguien siempre contraataca diciéndonos la cantinela: "hey tu escéptico ...¿En que te molesta que tu prójimo gaste su propio dinero en Tarot, Adivinación, Pulseras mágicas, Elixir dietéticos, Santería, Terapias alternativas, horóscopos…etc., etc., etc.?". Quizás en esos casos es sólo cuestión de separar un tonto de su dinero. Acá hablamos de personitas humanas y su futuro. Todos suponen que los padres siempre desean lo mejor para su hijo… pero hay un daño que queda en ese niño que le toleran su desorden, rabietas, indisciplina, descortesía, etc. Además enseñándole que la culpa siempre es de los demás y que es tan especial que toda la humanidad depende de él… Ese daño lo pagaremos todos nosotros.

Moraleja: “No está demostrada la existencia de niños índigo. Está más que demostrada la existencia de padres ingenuos y mal criadores”.

22.11.10

Entrevista sobre Niños Índigo

En el programa de podcast La Rueda del Misterio, que se emite desde Málaga, me realizaron una entrevista sobre los Niños Índigo.

Se trató del programa número 63, cuya primera parte la titularon "El Secreto de los Niños Indigo".
El programa está dirigido por Miguel Ángel Pertierra y cuenta con numerosas emisiones y un grupo de colaboradores que asisten con atino cada emisión.

1.7.10

Niños Índigo: la prueba de su existencia

Carlos Quintana

Como ya expresé en el artículo original de esta bitácora, la historia de los Niños Índigo tiene aspectos profundamente racistas.

En síntesis, los indigólogos afirman que los Niños Índigo tienen un ADN distinto que los hace superiores (por ejemplo su sistema inmunológico es superlativo y no se enferman) lo cual se debe a que son una nueva raza humana, y todo eso fue demostrado científicamente en la Universidad de California.

Esto, de ser cierto, sería un descubrimiento extraordinario, la novedad más importante de la historia del conocimiento.
Los textos que hacen referencia a esta parte de la historia fueron analizados muy claramente por el biólogo mexicano Edgardo Sepúlveda, sugiero leer sus artículos donde muestra las numerosas inconsistencias de esas afirmaciones.


María Paoli en el artículo “Quienes son los Niños Índigo?” dice que “Esto ha quedado demostrado en estudios realizados en la Universidad de California (UCLA)” y pasa a relatar que los experimentos consistieron en mezclar células de Niños Índigo con “dosis letales” de virus de SIDA y células cancerosas. ¿El resultado? Las supuestas súper células de los supuestos súper Niños Índigo no fueron afectadas, para pasar a la perorata del sistema inmunológico fortalecido y la inmunidad a las enfermedades.

LAS PRUEBAS CIENTÍFICAS

El que inventó la historia del ADN mutante (la única fuente que citan los charlatanes índigo) fue un tal Drúnvalo Melkisedeck, un “espiritualista” (otro pseudocientífico que promueve la ignorancia).

Así Drunvalo estudia el ADN mutante

En Children of AIDS de su pasquín “The Ancient Secret of the Flower of Life” (volumen 2) dice que el ADN tiene codones en blanco, y que hay niños que “activan” 4 codones “apagados” en los humanos, para no enfermarse de sida y que esta manifestación es el futuro de la humanidad.

Según el charlatán espiritualista, y apoyado por otros colegas, los codones activados son la evidencia de que hay niños con un sistema inmune súper saludable.
De allí, a que estos niños imaginarios son los Niños Índigo hay un sólo paso que aprovecharon todos los indigólogos.

El estudio de la Universidad de California

Drunvalo en Children of AIDS dice que existe un estudio que demuestra lo ya expresado para los codones que se activan y se apagan y que fue elaborado por la Universidad de California.
Veamos, Drunvalo cita un estudio de una universidad prestigiosa donde se demostraría lo del ADN mutante y los codones bailarines, María Paoli lo toma y le agrega detalles de cómo habría sido el experimento con células de cáncer y de sida.

Luego, decenas de pseudocientíficos tomaron como fuente de todo saber de la fortaleza y racismo índigo al “estudio de la Universidad de California”.

Drunvalo presenta datos concretos de cual fue el estudio.


Se refiere al artículo “Clearance of HIV Infection in a Perinatally Infected Infant” (en el link está la versión completa) publicado por la revista científica New England Journal of Medicine en el volumen 332 del 30 de marzo de 1995.
Esto se puede verificar en pocos segundos de búsqueda en la web ya que el artículo es de acceso libre y, de hecho, fue un aporte de relevancia a la medicina.

En este caso la prueba parece demoledora, incuestionable: el artículo existe y fue elaborado por verdaderos científicos de una universidad real, publicado en una revista científica y no en una de ocultismo.

Pero... ¿Qué dice el artículo sobre los Niños Índigo o sobre niños con codones activados y células inmunes al sida y al cáncer?

Me tomé el trabajo de leerlo completo. La autora Yvonne J. Bryson y sus cinco colaboradores informan del estudio de un caso, un niño que fue infectado con el virus del HIV mientras estaba en gestación y concluyen que a los cinco años de nacido no se detectaron rastros del virus usando las técnicas adecuadas.

Nada más. No hablan de Niños Índigo, ni de niños con ADN diferente, ni de sistemas inmunes fortalecidos, ni de codones danzantes, ni de extraterrestres, ni de Kryon, ni de “mezclar células índigo con sida y cáncer”.

Todo se trata de un invento de los charlatanes índigos. En todo caso el estudio de la Universidad de California que demostraría todo eso: no existe porque nunca fue realizado.

En Los Niños Índigo Existen decía que estaba interesado en conocer las pruebas de la existencia de estos seres imaginarios, entre ellas descartaba al "estudio de la Universidad de California" por inexistente. Ahora, lo descarto también por ser un argumento manipulador de la evidencia, es decir: inventa una conclusión falsa basado en un artículo que se refiere a otro tema.

En este caso la falta de escrúpulos de los “maestros” New Age los llevó al extremo de citar un estudio real con autores reales, pero mintieron en el contenido, exponiendo a sus autores y a la institución como los descubridores de una fantasía pseudocientífica. La mentira es todavía más perversa y nociva, en tanto que involucra a dos dolencias gravísimas como el sida y el cáncer.



¿Usted pondría en manos de estos charlatanes la vida, la educación o la salud de sus hijos?


15.11.09

DE LA FICCIÓN A LA REALIDAD: LOS NIÑOS ÍNDIGOS

Arturo Escalante Aguilar en su blog Escribiendo desde la Victoria publicó un extenso e interesante artículo donde analiza profundamente las derivaciones del fraude de los Niños Índigo en el artículo De la Ficción a la Realidad. Los Niños Índigo.

Desde ¿Los Niños Índigo? recomendamos su lectura para todos aquellos que todavía creen en las fantasías New Age o para quienes tienen dudas acerca de esta impostura.

CARLOS Q.

23.10.09

Niños índigo: ¿Espiritualidad o Racismo Energético?

Por F. Fernando Ruiz-Torres*

"La eugenesia (buen gen), filosofía social que propugna por la mejora de los elementos hereditarios de los seres vivos mediante varias formas de intervención, es positiva cuando se aplica a la selección artificial en plantas y animales útiles al ser humano. Es negativa cuando se aplica a los seres humanos porque, en el fondo, pretende imponer ideologías con elementos racistas. Los criterios de selección son, en el caso de niños índigo, atributos que, elegidos arbitrariamente, benefician a cierto grupo selecto y perjudican a otro, lo que es absolutamente inadmisible."
Leos K. Felton.

"La teoría de la inteligencia superior es muy conveniente para los que ocupan los peldaños superiores de la escala social y económica. Esta postura es totalmente coincidente con la teoría de la raza superior y los subhumanos, curiosamente sostenida por la biología y sociología nazis."
Isaac Asimov.


Cierta persona del medio esotérico de la Ciudad de México, allá por el año 2003, hizo un ‘análisis’ de aura y otras pruebas a un niño de aproximadamente nueve años de edad.

La mamá -mujer humilde- y él, esperaban ansiosos el dictamen. Luego de unos minutos de espera, la experta sentenció con frialdad: ‘Lo siento señora, su hijo no es un niño índigo’.El rostro del niño evidenció que había recibido la noticia con gran pesar, la madre lo miró un tanto desilusionada, pagó el ‘estudio’ y sin decir nada más que dos o tres palabras, salió del lugar.

Hace tiempo se pensaba que los seres humanos estábamos divididos por razas.

Ahora esto es anacrónico, de acuerdo a los recientes descubrimientos genéticos se sabe que somos una sola raza, el color de la piel nada tiene que ver con el viejo concepto de la diferencia racial. Así es que si la ciencia ha abolido la diferencia racial y las luchas sociales han logrado cierta igualdad de derechos, el ego colectivo ( ha inventado una manera novedosa para otorgar privilegios y marcar diferencias de superioridad, o insinuar la inferioridad, de un(a) niño(a) con respecto de otro(a): el color predominante en el aura (añil o azulado), que denotaría superioridad mental y espiritual.

Conozco a un matrimonio en California que tiene dos hijas, una de ellas –me dicen- es ‘índigo’, la otra es ‘normal’.

La índigo va a una escuela especial para niños índigo y sus padres la tratan bajo el código índigo: seguridad y respeto, no violencia, amor y verdad. Y como la otra es ‘normal’, entonces el trato para ella es… ‘normal’. Además, la índigo tiene unas maneras despectivas, humillantes, hacia su hermana ‘normal’, los padres lo permiten y justifican porque entre otras los ‘índigo’ –afirma la teoría- llegan al mundo sintiéndose reyes y se comportan como tales; parecen ser antisociales, a menos que se encuentren con personas como ellos.

Esta arrogancia permitida y el hacerlos cómplices de nuestros sueños de tener un niño genio o especial (secreto de muchos mamás y papás), puede ser muy delicado para su sano desarrollo psíquico. En todo niño, sin excepción, es incluso necesario hacerles sentir que son maravillosos, capaces de lograr grandes cosas y, en cierto sentido, especiales, pero jamás, por ningún motivo, enseñarles que son superiores a otro semejante.

Los conflictos que llegan a desarrollar por su precoz prepotencia, por las presiones, expectativas y frustraciones por parte de sus padres son, créanme, devastadores.

Un segundo tema es que los ‘índigo’, según esa versión, suelen ser hiperactivos y de poca concentración especialmente escolar. Así, un analista esotérico poco versado en la ciencia del comportamiento infantil, al detectar estos síntomas, puede que determine que se trata de un ‘índigo’ cuando en realidad el menor pudiera padecer un síndrome llamado Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) que se presenta con frecuencia en los niños, cuyas causas pueden ser diversas, y su identificación y tratamiento oportunos pueden prevenir muchos de los problemas asociados con este síndrome. Una confusión en este sentido, o peor, dejarse llevar por el criterio ‘índigo’ de que es así porque no se adapta al mundo convencional por su ‘linaje extraterrestre’ es de consecuencias para el niño.

Aclaro que este artículo no es para promover a los grandes laboratorios farmacéuticos que han puesto los ojos en un mercado sensible lo que les ha generado ya jugosos dividendos, personalmente estoy en desacuerdo con que el tratamiento de TDAH –salvo en casos severos- sea con uso de cafeína, nicotina o fármacos psicoestimulantes (especialmente la controvertida ritalina). Hay tratamientos psicoanalíticos alternativos, serios, con muy buenos resultados.Nuevas marcas medicamentosas que ofrecen milagros (sin decir nada sobre los efectos secundarios) se están colando peligrosamente en las escuelas, lo mismo sucede con la promoción y la explotación comercial del llamado fenómeno índigo.

Tampoco pretendo anteponer la ciencia racional sobre la ciencia intuitiva, ambas tienen mucho que aportar a la humanidad. Y si bien los partidarios de una corriente excluyen a la otra, creo que ambas tendrán, alguna vez, que trabajar juntas. La lectura del aura con aparatos sensibles de medición de energía que envuelve a los organismos vivos es todavía polémica igualmente su interpretación; además ésta se sustenta en un código de colores cuya lectura es bastante simplista. Una tonalidad, al igual que un sueño, puede dar lugar a varias interpretaciones y aún más, lo que pudiera traducirse como sano y espiritual pudiera ser el aviso de un síntoma.

No es preciso hacer estudios de aura para encontrar en cada nuevo ser que llena de luz a nuestro planeta con su sola presencia el hálito espiritual divino, el milagro de la creación.
Corresponde a ti como mamá, como papá, conservar esta llama: predicar con el ejemplo, enseñarle los más elevados valores espirituales, dedicarte a su formación interior, artística, física e intelectual cada día de tu vida, protegerlo de la andanada de estupideces mediáticas y de la manipulación mental de las nuevas tecnologías, hacerlo(a) sentir amado(a), único(a), irrepetible, pero hacerle saber que todo en el mundo es así. Enséñale a respetar a sus semejantes, a la naturaleza, muéstrale la sencillez y la compasión, que te vea orar o meditar, que encuentre en ti el espejo de la tolerancia y la armonía.
Enséñale a reír, reaprende a jugar, muéstrale la magia de los amaneceres y los atardeceres y, a su ritmo, el sentido de la responsabilidad y la disciplina. No es una fotografía de la más sofisticada cámara kirlian la que va a decidir si tu hijo(a) es ‘especial’ por cierto tono en su campo biomagnético, no tiene una máquina la opinión definitiva; la tiene, lo sabes, tu propio corazón.

*Publicado originalmente en Mamás y Bebés Blog Reproducido con autorización

21.8.09

Los niños no son índigos, son de color piel

Keith Coors

¿Acaso es tan difícil de ver? No hay niños color índigo, sólo hay niños del color de su piel. Y con esto quiero decir que esto de catalogar a los niños como índigo (supuestamente por el color de su vida, lo que eso sea), no es nada útil para nadie, y sí provoca una expectativa falsa sobre ideas que están muy lejos de la realidad.¿Que es un niño índigo?

Hace unos años escuché por primera vez esto de los niños índigos. Investigué un poco y descubrí que esta clasificación tiene que ver con lo que una persona de nombre Nancy AnnTappe afirma percibir alrededor de las personas. Ella misma describe esta percepción como una forma de sinestesia (lo que en su acepción sicológica significa "Imagen o sensación subjetiva, propia de un sentido, determinada por otra sensación que afecta a un sentido diferente", según la RAE), que le permite ver colores cuando conoce una persona. Según ella, por allá por la década de 1960, comenzó a percibir colores en las personas, detectando en algunos niños una coloración tendiente al azul (o índigo), color nuevo para su "experiencia colorida", y que además presentaban algunas características raras para aquél entonces.

Tappe afirma que fue la primera persona que identificó esta coloración como un cambio evolutivo en la humanidad. Afirma también que actualmente hay dos presidentes que tienen esa característica de "color de vida": Barack Obama y Rafael Correa (de Ecuador). Algunos de sus seguidores, notablemente Lee Carroll y Jan Tober, abundaron sobre el tema, hasta hacerlo harto popular, especialmente entre la gente que sigue el movimiento denominado de la "Nueva Era". Ellos definen al niño índigo así:

Es un niño que muestra una nueva y poco usual serie de atributos sicológicos con un patrón de comportamiento no documentado antes. Este patrón de comportamiento tiene factores comunes únicos que sugieren a quienes interactúan con los niños (los padres en particular) que deben cambiar la forma de tratarlos y de criarlos para poder lograr un equilibrio adecuado. Ignorar estos nuevos patrones de comportamiento es crear un desequilibrio potencial y una gran frustración en la mente de estas preciosas nuevas vidas.

La primera crítica es que ellos dicen que los atributos sicológicos de estos niños son poco usuales. Como comentaré más adelante, pueden ser poco usuales de acuerdo a ciertos cánones, pero no lo serían tanto si suponemos otras causas más comunes como "disparadoras" de ese comportamiento. Pero ¿qué características tienen? Si no se es la Sra Tappe (o alguno de sus enriquecidos seguidores) y no se tiene esa cromatográfica sinestesia ¿cómo identificar que un niño es o fue índigo?
Yo me hubiese imaginado algo así como una especie de ondas alfa del cerebro o un campo electromagnético identificable mediante instrumentos. Pero no es nada de eso, nada que pueda medirse o comprobarse en forma independiente. Es la visión de esta mujer y de los seguidores de su método, lo que hace que la clasificación se realice. Y algo más para los no sinestésicos como su seguro servidor, consistente en una serie de características observables, que listo a continuación (tomado del libro "Niños Indigo" de Lee Carroll y Jan Tober):

1. Ellos vienen a este mundo con un sentimiento de realeza (y frecuentemente se comportan como tales).
2. Ellos tienen la sensación de "merecer estar aquí" y se sorprenden cuando otros no comparten esa misma sensación.
3. La autoestima no es para los Niños Índigo un gran tema de preocupación (ellos con frecuencia les dicen a sus padres "quienes son ellos" - los niños).
4. Ellos tienen dificultad en aceptar una autoridad absoluta (autoridad sin ninguna explicación o sin más alternativas).
5. Ellos simplemente no harán ciertas cosas; por ejemplo: esperar en una fila es muy difícil para ellos.
6. Se frustran con sistemas que son como rituales y que no requieren de pensamientos creativos. 7. Con frecuencia ellos tienen mejores formas de hacer las cosas, tanto en la casa como en la escuela, lo que los hace ser como rebeldes, inconformes con cualquier sistema.
8. Parecen muy antisociales a menos que se encuentren entre niños de su misma clase. Si no hay otros con el mismo nivel de consciencia, a menudo se tornan retraídos, sintiendo que ningún ser humano los entiende. La escuela es para ellos un sitio donde les es muy difícil socializar.
9. Ellos no responderán a la disciplina de "culpa" ("espera que tu padre llegue a casa y se entere de lo que has hecho").
10. Ellos sienten timidez en expresarle a usted lo que necesitan.

Pues estas descripciones me parecen a las características de los signos del zodiaco. Como que cualquiera puede entrar en el aro. Pero quizás no cualquiera. Si leemos con detenimiento estas características y las analizamos podremos entender que quizá algo más prosaico y mundano se encuentra detrás de este concepto que representa una supuesta evolución espiritual.

Empecemos con la primera: Ellos vienen a este mundo con un sentimiento de realeza (y frecuentemente se comportan como tales). Esto no tiene nada de especial. Todos los bebés recién nacidos manifiestan ese comportamiento. Ningún niño recién nacido pedirá las cosas por favor o expresará de manera educada que desea que le satisfagan sus necesidades (por razones obvias). Simplemente expresará un chillido que los padres deberán aprender a identificar de acuerdo con su origen: dolor, hambre, sueño, incomodidad, etc. Cuando los bebés crecen deben aprender a expresar sus necesidades con el lenguaje aprendido, pronunciando palabras al estilo de "leche", "agua", "duele", "duerme", "pica", etc. Más entrados en edad, se esperaría que los niños expresen sus requerimientos de manera educada, al estilo de "¿me das leche, por favor?". Si no lo hacen así, digamos, a los seis años de edad, quizás sea porque son índigos, pero quizás sea porque no se les ha educado bien. Si los padres han acostumbrado al crío a satisfacer sus necesidades sin que éste se los solicite de manera educada, así crecerá, ordenando como un pequeño tirano, para que le den sus satisfactores. Así que esta característica podría ser de índigo o de maleducado.

La segunda: Ellos tienen la sensación de "merecer estar aquí" y se sorprenden cuando otros no comparten esa misma sensación. Esto es demasiado complejo. Es decir, me cuesta trabajo imaginarme a un niño que NO se sienta así. Una vez más, cuando el bebé recién nacido llora, es porque está reafirmando su presencia, su necesidad de atención. Si el bebé sintiera que "no merece" estar aquí, no lloraría, no expresaría nada y simplemente se dejaría morir. Este comportamiento de supervivencia es instintivo, TODOS los seres vivos nos aferramos a la vida de manera natural y con eso afirmamos nuestro deseo y voluntad de "merecer estar aquí". Quizá no decimos explícitamente "merezco estar aquí", pero lo expresamos cuando valoramos nuestra vida por sobre nuestra muerte.

La tercera: La autoestima no es para los Niños Índigo un gran tema de preocupación (ellos con frecuencia les dicen a sus padres "quienes son ellos" - los niños). Y es que otra vez, la autoestima es un concepto bastante complejo que no es motivo de preocupación para un niño recién nacido, ni siquiera cuando crece un poco más. Los mayores solemos preocuparnos por la autoestima de los niños primero que ellos. Un niño que comienza a tener problemas con su autoestima, NO identificará que TIENE problemas de autoestima.Un niño puede ser bastante competitivo, si ha crecido en un ambiente con hermanos que luchan por obtener los favores y satisfactores de sus padres. Pero también puede volverse retraído si es que con ese comportamiento genera lástima en los mayores, como para que se le atienda por sobre los demás que compiten. Si se trata del primer hijo de un matrimonio quizá no desarrolle este comportamiento competitivo desde pequeño, como consecuencia del trato con sus padres, pero a medida que el ambiente se puebla de otros niños (hermanos, primos, compañeros de juego o de escuela) entonces quizás se manifieste. Así que la autoestima no sería preocupación de ningún niño pequeño pues es un concepto que más bien preocupa a adultos.

La cuarta representa todo un reto: Ellos tienen dificultad en aceptar una autoridad absoluta (autoridad sin ninguna explicación o sin más alternativas). Imaginemos el siguiente escenario: Un niño de unos 6 meses de edad se enferma y es necesario inyectarlo. Por supuesto que protestará y se rebelará a la "autoridad absoluta" que implica tenerlo quieto un momento para que el médico o enfermera le aplique la inyección. Y entonces ¿cómo le explica uno a ese niño que es necesario que le inyecten para que se alivie? Es decir, uno puede hacerlo, pero dudo mucho que el infante siquiera comprenda, a esa edad, el concepto de enfermedad.Ahora bien ¿cómo enseñarle conceptos a un niño sin hacer uso de la autoridad? Imaginemos que a los dos años de edad se le enseña al niño el concepto de "electricidad". Alguien podría preguntar ¿Por qué enseñarle ese concepto? Simple, porque a esa edad son demasiado curiosos y resulta bastante prudente prevenir que introduzcan objetos metálicos en las tomas de corriente. Así que cuando uno le dice al niño "no metas ese objeto allí porque hay electricidad", uno tiene dos alternativas, o hacer uso del principio de autoridad paterna (o materna) o bien darle una descarga eléctrica para que aprenda el concepto por propia experiencia.Incluso podemos ir a más profundidad; no hay nada más autoritario y arbitrario que un idioma. Sería imposible enseñar un idioma a cualquier niño si éste cuestionara a cada momento ¿por qué llamarle leche a ese líquido blanco que me han dado desde que nací? Así que es probable que los autores de este libro jamás se preguntaran si es bueno tener una autoridad "absoluta" como padre al enseñar un idioma (el natal) a un niño. O quizás lo sepan pero de manera taimada lo eviten para vender su libro. Incluso en aspectos de alimentación, los padres inician la transición de sólo leche hacia vegetales, carne y harinas sin preguntarle al niño si eso es lo que quiere.Porque detrás del concepto de autoridad paterna (o materna), está el concepto de responsabilidad. Esta autoridad tiene su fundamento principal en la responsabilidad. Y la responsabilidad de la vida (completa) de los niños recae totalmente en los padres. Cierto, no todos los padres la tomamos como algo tan serio o absorbente, y esa quizá sea una causa de que los niños de ahora cuestionen esa autoridad. Los mismos medios masivos de comunicación fomentan de manera irresponsable el traslado de esa responsabilidad hacia modos menos efectivos (sobre esta muy personal opinión, prometo escribir una entrada en breve). Espero que baste un ejemplo sobre esto de la responsabilidad. Si a un crío de 3 años le permiten que tome la responsabilidad total de su alimentación, lo más probable es que escogería los helados, los dulces, las frituras y otros alimentos repletos de carbohidratos, y los combinaría con agua gaseosa endulzada. Evitaría el pescado y las frutas, y casi ni miraría a las verduras. Si le permiten a un niño de 6 años tomar la responsabilidad de su educación, escogería el CartoonNetwork, el Disney Channel, y otros similares, en lugar de ir a la escuela o leer libros.Por supuesto, si los padres hemos tomado a la ligera esa responsabilidad, un resultado casi obvio es que los críos cuestionen nuestra autoridad. Y no necesariamente como resultado de su "indiguez".

La quinta: Ellos simplemente no harán ciertas cosas; por ejemplo: esperar en una fila es muy difícil para ellos. ¿Por qué pensar que los niños están limitados como para NO hacer ciertas cosas? Se entiende que la paciencia NO es una característica infantil, y más bien los niños sanos son inquietos y difícilmente estarán tranquilos en una fila. Así que eso no tiene nada que ver con ser índigos, sino más bien con el aprendizaje del dominio de emociones, proceso por el que todos pasamos para llegar a la etapa adulta con madurez. Si un muchacho de 14 años no puede estar en una fila, no pienso que sea por ser índigo, sino por ser inmaduro. Respecto a otras "ciertas cosas" el propio libro aclara que "El aburrimiento puede traer arrogancia en los Índigo, así que no dejen que se aburran". Por lo tanto esas ciertas cosas serían las que, a juicio del niño, son aburridas. Pero seamos sinceros ¿Quien chingaos considera divertido estar formado en una fila?

La sexta: Se frustran con sistemas que son como rituales y que no requieren de pensamientos creativos. Esto le pasa a la mitad de la población, pero el ser creativo no necesariamente hace de un niño especial o espiritualmente evolucionado. Y por otro lado, algunos aspectos de la vida serán una especie de ritual. Y como adultos deberemos seguirlos al pie de la letra. Aprender a seguir instrucciones o apegarse a una serie de pasos o requisitos es síntoma de madurez.

La séptima: Con frecuencia ellos tienen mejores formas de hacer las cosas, tanto en la casa como en la escuela, lo que los hace ser como rebeldes, inconformes con cualquier sistema. La pregunta es ¿con qué tanta frecuencia? He conocido muchos niños que se rebelan sólo como postura, y no como una forma propositiva. Habría que diferenciar si la inconformidad es resultado de una falta de adaptación o porque en realidad hay propuestas novedosas y efectivas. Pero esta característica podría darse en cualquier ser humano y no por eso hacerle índigo.

La octava: Parecen muy antisociales a menos que se encuentren entre niños de su misma clase. Si no hay otros con el mismo nivel de consciencia, a menudo se tornan retraídos, sintiendo que ningún ser humano los entiende. La escuela es para ellos un sitio donde les es muy difícil socializar. Hay también niños antisociales que lo son como resultado de un proceso de tensiones familiares. He sabido de casos de chicos que golpean sin piedad a quienes ellos consideran diferentes. Dudo mucho que esto les convierta en seres espiritualmente evolucionados. Una vez más, al observar el comportamiento antisocial de un chico o chica uno debiera preguntarse si el origen se encuentra en una problemática familiar. Hogares donde la responsabilidad sobre la formación y educación de los hijos es tomada a la ligera, con probabilidades altas darán como resultados chicos y chicas antisociales.

La novena: Ellos no responderán a la disciplina de "culpa" ("espera que tu padre llegue a casa y se entere de lo que has hecho"). Bueno, aquí hay un truco de prestidigitación literaria. El ejemplo utilizado no acude al sentimiento de culpa en el chico o chica. Acude más bien a un control defectuoso de la responsabilidad de la madre del chico o chica (traducción: yo no puedo o no me atrevo a reprenderte por lo que hiciste así que tu padre lo hará y será bastante malo). Ese es un modo de mal educar a los críos, no enfrentando la situación directamente y no utilizando la autoridad que debería tener, debido a su responsabilidad (pero claro si no la tiene o la evade, alguien está haciendo mal su trabajo). Esto no es un síntoma de evolución espiritual, es un defecto en el modo de educar.

La décima: Ellos sienten timidez en expresarle a usted lo que necesitan. Esto contradice la primera, la segunda y la tercera. Si se comportan como de la realeza, si reafirman su merecimiento de "estar aquí" y si le recuerdan a sus padres quienes son ellos ¿cómo es que son tímidos en decir lo que necesitan? Aquí se descubre una trampa típica de los horóscopos: son tan generales y contradictorios que cualquiera se siente aludido cuando lee el que le corresponde (aunque sea el mismo para todos; ver la entrada El mejor horóscopo que me han hecho). Pero vayamos más allá. ¿Cuántas personas, incluso adultas, son capaces de decir exactamente lo que necesitan? ¿Cuántos de nosotros tenemos problemas por identificar la diferencia entre lo que queremos y lo que realmente necesitamos? Así que esta característica no sólo es contradictoria sino tan general que encuadra al 95% de la población. Al menos en determinado momento de su vida.

Las falsas expectativas.

Hasta aquí vamos mal, pero no tan mal. Tenemos a una mujer que dice ver colores en la gente y un par de astrólogos... ejem... digo... sicólogos, haciendo una lista de características que obedecen más a las deficiencias en el modo en el que los padres educan, y tan general que cualquier niño encajaría... y esto es lo más importante: Tan general que cualquier padre desearía comprar su libro. Bueno, no cualquiera, pero sí un número grande (como grande es la cuenta bancaria de ambos, a estas alturas).Lo más malo es que en su libro incluyen textos de dudosa autoría, como el que se menciona en el capítulo 6, y del cual os brindo dos párrafos (aclarando que es de autor desconocido, ¡vaya manera de eludir la responsabilidad!):

Ha llegado el tiempo del Gran Despertar. Ustedes que han elegido elevar sus ojos de la oscuridad hacia la luz, son bendecidos al presenciar el acontecimiento de un nuevo día en el planeta Tierra. Porque su corazón ha ansiado ver la paz real donde reinaba la guerra, mostrar misericordia donde dominaba la crueldad y conocer el amor en donde el temor congeló los corazones, son privilegiados para su mundo.
. . .
Sigan adelante y vivan la vida del alma radiante que son. Glorifiquen al Creador en cada una de sus obras. Ustedes son importantes, son necesarios y son valiosos. No permitan que el oscuro manto del temor esconda la luz de su visión. Ustedes no han nacido para fracasar. Están destinados a tener éxito. La esperanza del mundo ha sido sembrada en su pecho, y tienen asegurado el éxito porque representan al Uno que los Creó.


Aquí es donde se siembran las expectativas sobre la base de creencias religiosas e ideología pletórica de flores y amor al prójimo. No es que esté mal amar o las flores, lo que está mal es pretender que estos niños añiles han recibido del Uno, la tarea de enmendar este mundo, sin hacer nada para lograrlo. Más parece la historia de Harry Potter, el adolescente que de pronto se da cuenta que tiene poderes mágicos, por obra y gracia de la herencia mágica.

En especial, lo que sorprende es que todo nace de la visión de la Sra. Tappe, que puede ser debida a cualquier cosa, pero que con mucha probabilidad provenga de sus deseos, de sus anhelos y de la posibilidad de que a través de la creencia en sus palabras la gente pudiese cambiar, para bien. El problema es querer lograrlo con la mezcla de conceptos espirituales que no siempre son compartidos por todo el mundo. El peligro, en este caso es que puede catalogarse a los niños mediante un sistema basado en la fe y no en características reales.
Las características citadas pueden deberse a un sinnúmero de causas, que no tendrían nada que ver con la idea del poder para cambiar un mundo entero. En lo particular se me ocurren un par de escenarios que debieran ser tomados en cuenta a la hora de explicarse este comportamiento de los niños actuales:

Los escenarios alternativos

Lo que me viene a la mente al leer estas características (y otras que son más insulsas y que pueden ser consultadas en el soporte documental), es el concepto de mala educación. Recuerdo que en mis días de infancia, los niños que exhibían estas características eran los "malcriados", que significaba mal educados. No eran los más inteligentes, no eran los más comprensivos, no eran los más evolucionados; eran niños que uno evitaba para no salir lastimado. En mis años de infancia yo no entendía las causas de ese comportamiento, simplemente veía que así eran y que estaba mal que se comportaran de esa forma. Pero al crecer y convertirme en profesor y posteriormente en padre, me convencí que no era que asi hubiesen nacido, sino que eran en gran parte el producto de una mala educación, de una falta de compromiso de sus padres por tomar la responsabilidad de su paternidad por los cuernos. En resumidas cuentas, de un proceso de formación mal llevado, mal enfocado.

¿Era solo causa de los padres? No pienso que así haya sido. Hay innegables factores culturales. Por ejemplo, en mis tiempos de infancia, muchos padres de mis amigos eran adultos jóvenes, descubriendo el hippismo y las drogas, la libertad sexual que traía la píldora anticonceptiva, la rebelión contra los paradigmas raciales y económicos así como el ambiente generalizado de esperanza (y terror) de la post guerra.

En forma paralela a este movimiento social, se desarrollaba una era de adelantos tecnológicos que trajeron a cada hogar la información que antes sólo estaba al alcance de los eruditos o los pudientes. Recordemos que las pocas noticias mundiales eran sólo vistas a través de los noticieros en el cine o en los pocos diarios de circulación nacional. Las cadenas televisivas transformaron esa línea de engtrega pues podían traer las noticias a la comodidad de la sala, casi en tiempo real. Y entonces las sociedades decidieron pasar muchas horas frente al televisor como alternativa de entretenimiento (y de educación involuntaria). Menos hijos por familia, padres disfrutando de la libertad sexual, incremento en el número de divorcios, la televisión como padre sustituto, la información fluyendo por canales insospechados y al alcance de los sentidos de los niños, sin mediación del juicio paterno sobre su contenido u oportunidad.

El resultado parece ser casi evidente: Muchos niños manejando información antes reservada a adultos, escacez de valores familiares, rebelión contra los esquemas establecidos. Este escenario da como resultado niños con las características antes descritas. Pero esto NO es evolución espiritual; es cambio de paradigmas de educacion familiar, y de valores sociales, montados sobre lo que se conocerá en el futuro como la era de la información.

Por estas razones (que no refiero a ligas externas porque se basan en mis propias experiencias de vida), es que no considero conveniente forzar a los niños mal educados a pertenecer a una generación de salvadores de la humanidad. Más bien deberíamos retomar el valor de la responsabilidad y autoridad paterna y materna como punto de apoyo para reformar la educación en el seno familiar, basada en valores y en tiempo de calidad: menos horas frente a la TV y más control sobre el material que llega a nuestros hijos. Los filtros de contenido deberían ser casi obligatorios para el acceso de niños a la internet.Ya lo sé, parecería que la contrapropuesta va en contra de la corriente. Pero no es imposible de implementar. La misma tecnología puede hacer esas herramientas de control accesibles a los padres, como apoyo a su papel preponderante en el desarrollo y formación de los niños y jóvenes.

Por ello es que el título de esta entrada hace referencia a lo que es más obvio: Los niños son eso, niños, del color de su piel. No son adultos, no son sabios en el cuerpo de niños. Y su desarrollo debiera ser un asunto de la mayor importancia; no debemos pasar por alto que un humano pasará la mayor parte de su vida siendo adulto, por lo que su etapa de formación debe ser tomada con bastante responsabilidad. Y sí, mucho amor.

*Publicado originalmente en el blog Ahuramazdah ¡vive sin dogmas!

7.4.09

Niños índigo y los cristal: un mito engañoso

Belduque


Me he dado cuenta como ha aumentado la creencia entre algunos padre de familia sobre la supuesta existencia de unas entidades especiales y superiores a los seres humanos normales, me refiero a los denominados niños índigo y cristal.
Es bastante interesante como los describen las personas que dicen creer en ellos y que promueven su existencia. Se dice mucho de ellos, pero hay muy poco de realidad en ello. Según estas personas, presuntamente los niños índigo tienen una nueva serie de atributos psicológicos con un inusual patrón de comportamiento. Dicen que pueden desarrollar percepción extrasensorial y tienen una alta sensibilidad corporal (hiperestesia), pero no hay pruebas de esto; además mencionan que tienen un gran ingenio y mucha creatividad, curiosamente casi todos los niños son así. ¿En dónde esta lo especial en ellos?

Se les denominó como "niños índigos" por la supuesta parapsicóloga Nancy Ann Tappe, quien afirmaba que, presuntamente, posee la capacidad de ver las "auras" de las personas. Entre otras cosas, se dice que los niños índigo poseen una "cualidad especial" en su glándula pineal, lo que les permite interactuar con el medio ambiente de una forma más certera que las personas comunes, sin dejarse llevar por las emociones, pero de esto no hay ninguna evidencia real, es más, todo indicaría que es todo lo contrario. Además comentan que aunque en algunas ocasiones puedan parecer crueles con otros, no lo son, curiosamente los niños comunes también se comportan de esta manera frecuentemente. Según los creyentes en esto, los niños índigo pueden ser confundidos con niños que padezcan síndrome del déficit de la atención e hiperactividad, pero según ellos no es lo mismo, aunque las evidencias confirman lo contrario.

Afirman que por eso los niños índigo son calificados como rompedores de sistemas, y a menudo son vistos como rebeldes o hiperactivos, pues su conducta puede ser considerada algo desordenada y que son muy distraídos, que sólo se concentran en cosas que sean de interés para ellos, algo que, siendo objetivos, es muy normal en cualquier niño común y corriente. Argumentan que se sienten lideres con gran autoridad y que las expectativas de los índigo son usualmente distintas a las de los niños normales, pero a final de cuentas todos los niños tienen expectativas distintas según la edad, del medio ambienta en que vivan y del desarrollo que tengan.

Es bien sabido que muchos grupos de ideologías esotéricas y de la "nueva era" los mencionan como si fuesen los "salvadores del mundo", que vienen a cambiar los sistemas del mundo, que vienen a formar el "nuevo orden", pero la realidad indica que los niños índigo en realidad no son más que simples niños como cualquiera, pero si estos y sus padres no son bien orientados y encaminados por especialistas profesionales, podrían terminar de maneras muy lamentables. Algunos de los promotores del movimiento índigo dicen que Albert Einstein fue un niño índigo, para ganarse seguidores con este falso mito, de lo cual, obviamente, no hay ninguna prueba real, como no hay pruebas de la existencia real de esta clase de niños especiales.

Algunos han argumentado que existen estudios en la UCLA (Universidad de California, Los Angeles) en donde se demuestra la existencia real de estos niños, pero la verdad es que tales estudios no existen, son falsos, y cualquiera puede verificarlo simplemente visitando el sitio de esta universidad o los archivos médicos y científicos referentes a este tema y verán que no existen. Pero sí se han hecho estudios de niños con conductas iguales a las descritas de los índigo, y se ha comprobado que son niños comunes y corrientes, solo que padecen algún tipo de deficiencia conductual. Incluso se ha argumentado que pueden activar a voluntad su ADN, como si se tratase de una máquina o un motor, algo que no es posible, puesto que el ácido desoxirribonucleico, que es un compuesto químico que tenemos en todo el cuerpo, no puede activarse o desactivarse a voluntad.

Los menores de edad merecen ser bien tratados y atendidos por sus padres, aunque estos no siempre saben como hacerlo, y en su desesperación inventan o creen cosas que no son reales con tal de justificar o remediar, a medias, las situaciones que se enfrentan en sus hogares. Nadie nace sabiendo ser padre o madre, pero hay instituciones públicas y privadas que les pueden asesorar como sobrellevar la vida con sus hijos. Recuerdo la frase de una madre que, según ella, su hijo es un niño índigo: "va más allá que nosotros y nos enfrenta a situaciones para las cuales no estabamos preparados". Esto es completamente común en padres jóvenes y sin experiencia en estas cuestiones de ser padre o madre, pero no por eso sus hijos son criaturas fuera de lo común.
Los cuestionarios o test para detectar si un niño es un índigo, definitivamente no funcionan, pues mencionan conceptos demasiado ambiguos y generales, en donde cualquier persona puede caer, y por lo mismo no funcionarían para determinar el factor índigo de una persona en especial. Por si fuese poco, los únicos que sí podrían detectar alguna cualidad especial en los niños son los profesionales psicólogos y psiquiatras infantiles, y ellos son los primeros en confirmar que el factor índigo no existe, pues su deber es proteger la salud mental de los niños. Procuremos no engañarlos, ni engañarnos, con ideas fuera de la realidad.

Los niños no necesitan que les inventen cualidades o facultades extraordinarias o paranormales para que sean especiales, el simple hecho de que sean niños los hace especiales, su inocencia, lucidez, su honestidad y todo lo demás que hay en ellos por simple naturaleza, ya los hace especiales. Respetémoslos tal como son, sin ponerles atributos fuera de lo común, o ¿es que necesita que su hijo tenga algo especial para tenerle cariño?
A final de cuentas: Esta demostrado que los "niños índigo" o el factor índigo no existen, solo es un mito, y no lo digo yo, lo dicen las evidencias que cualquiera pudiera comprobar si así lo quisiera hacer. Se necesita tener la mente abierta y los pies en nla tierra para poder darse cuenta de esto. No hablamos de cosas que no se saben o no se comprenden, es más, se ha estudiado e investigado estos y otros temas, la realidad es así. Recuerden: "la verdad se debe de saber". En el siguiente escrito comentaré sobre los "niños cristal" y la realidad de este mito tan difundido. Como dicen en la UCLA: "Que brille la luz".
Que tengan buen día.
srbelduque@gmail.com

Publicado originalmente en http://www.info7.com.mx/editorial.php?id=818&secc=19

3.3.09

LOS NIÑOS ÍNDIGO EXISTEN

Carlos A. Quintana

A lo largo de la experiencia de esta bitácora pude cumplir con el objetivo principal de compilar artículos que analizan racionalmente la impostura New Age de los Niños Índigo, debido a que son escasos y difíciles de hallar en la red.
Como comenté anteriormente la dinámica de esta página se caracteriza por presentar una retroalimentación que permitió generar nuevas ideas y debates. Los comentarios fueron importantes para encarar nuevos textos ya que se conformaron como una fuente de contacto directo con el crédulo en sus diferentes variantes. Esta experiencia de intercambio parece haber llegado a una meseta porque los discursos de los indigófilos se reiteran, y convierten los debates en algo aburrido por tener que contestar siempre lo mismo: “traiga sus pruebas”. Normalmente, frente a este pedido se termina el debate.

Como síntesis de esta experiencia, a la fecha puedo afirmar lo siguiente:

LOS NIÑOS ÍNDIGO EXISTEN
LOS NIÑOS ÍNDIGO NO EXISTEN

LOS NIÑOS ÍNDIGO EXISTEN


Son una creación de Nancy Tappe definidos por un carácter esotérico (el aura). Luego otros inventores de fantasías le agregaron condimentos: son extraterrestres, superpoderosos, una raza superior, etc. Esta existencia es meramente conceptual, es decir, carecen de un referente concreto en la realidad.
¿Qué significa esto? Que la idea de Niños Índigo no se confirma porque no tiene un correlato material en alguna persona que sea como lo define la idea.
Por ejemplo, la idea “mesa” tiene un referente conceptual: objeto plano elevado del piso para apoyar cosas y realizar tareas de distinto tipo. Esa idea tiene referentes concretos: los objetos que cumplen con esas características, como el que sostiene el teclado en el que estoy escribiendo o el que me sirve de apoyo para almorzar: idea y objeto coinciden. Lo conceptual y lo material se corresponden.
Con el concepto Niños Índigo no ocurre lo mismo, falta esa segunda parte, que la idea se corresponda con algún niño o adulto concreto que concuerde con esas características.

LOS NIÑOS ÍNDIGO NO EXISTEN 1

Como consecuencia de lo anterior, si no se pueden identificar niños que se comporten y que tengan las características de los Niños Índigo, entonces no existen niños a los que se los pueda llamar Niños Índigo.
Lo mismo ocurre con los Hobbits, los personajes de Tolkien: están definidos, tienen características claras que permiten reconocerlos, hasta contamos con dibujos y animaciones. Pero jamás se halló un Hobbit real. Si no podemos identificar a una criatura que sea como un Hobbit, pues los Hobbit sólo existen como una idea, no son reales.

LOS NIÑOS ÍNDIGO NO EXISTEN 2
Además, no se cumple con lo que afirman quienes inventaron a los Niños Índigo.
Por ejemplo, NO SE CUMPLE:
- Que el 80% (u otros altos porcentajes) de los niños actuales son Niños Índigo (de hecho no se conoce ni a uno).
- Que hay niños extraterrestres.
- Que hay niños con ADN distinto al humano.
- Que hay niños que no se enferman nunca.
- Que hay niños sanadores (y en el porcentaje de más arriba).
- Que hay niños de una raza diferente y superior.


Tampoco se cumple todo eso junto, lo cual sería propio de un Niño Índigo. Es decir los autores originales y posteriores que inventaron el concepto de los Niños Índigo les endilgaron características que jamás se encuentran en los niños.

Teniendo en cuenta lo anterior:
No se conocen niños con las características de los Niños Índigo, pero tampoco se ha demostrado la existencia de la mayoría de las características propiamente dichas que los definen.
Siendo así se puede afirmar que los Niños Índigo no existen en la realidad material.

TRAIGA SUS PRUEBAS

A pesar de esto
¿Usted afirma que los Niños Índigo existen en la realidad?
¿Afirma que usted o un conocido es un Niño Índigo?
Traiga sus pruebas, demuéstrelo.
Si lo hace yo me comprometo a divulgar que hay personas que son Niños Índigo, y a rectificarme de todo lo que escribí en esta bitácora.

Pero tiene que cumplir con dos requisitos:

REQUISITO 1. Lea todos los artículos de este blog. Si sigue sosteniendo que los Niños Índigo existen, pase al

REQUISITO 2. Argumentos que no califican como pruebas.
Debido a la experiencia de estos años de debates con indigófilos y crédulos ingenuos voy a comentar algunas de las “pruebas” que no califican como evidencia de la existencia concreta de los Niños Índigo, para que ni usted ni yo perdamos el tiempo.

1- La fe.
¿Usted cree en los Niños Índigo? Tiene esa libertad de opción, es su convicción. Pero la fe no mueve montañas ni materializa conceptos.

2- Su testimonio o el de alguien de su confianza.
Usted afirma que los Niños Índigo existen, porque se lo indica determinada experiencia personal. Bien, nuevamente es su convicción personal nadie puede cuestionarlo. Pero no es aplicable a toda la humanidad. Lo que usted relata no puede ser creído sin pruebas. Confío en que usted no miente, que no inventó su relato. Confío en su honestidad y en su convicción de los hechos. Pero nadie puede creer ciegamente en lo que usted dice ciegamente, su testimonio no convierte una idea en realidad. Para eso hacen falta pruebas.

3- El aura.
El efecto corona, mal llamado aura, es un fenómeno físico que se produce en condiciones definidas de humedad y corriente eléctrica. Cualquiera puede generar esas condiciones y capturar imágenes de auras, tanto de algo orgánico (vivo o muerto) o de objetos de cualquier material. Las propiedades esotéricas del "aura", es decir, lo que supuestamente significa el aura en términos de la new age y de las pseudociencias, jamás fue demostrado. Quienes dicen ver al "aura" a simple vista, mienten. Quienes dicen que las imágenes tomadas con Cámara Kirlian sirven para “diagnosticar” Niños Índigo, engañan.
Entonces, al "aura" no interesa como prueba de la existencia de los Niños Índigo.

4- Otras variantes pseudocientíficas o esotéricas.
La sanación mágica, la telepatía, la telekinesis, la comunicación con los muertos, el origen extraterrestre y otras variantes paranormales jamás fueron demostradas. Si usted recurre a alguno de estos argumentos, primero debe demostrarlos en general, y luego aplicado a la existencia de los Niños Índigo.

5- Coincidencia de características “índigo”.
¿Encuentra en usted mismo o en otra persona coincidencias con las características de los Niños Índigo? Esto sería una evidencia de la existencia de los Niños Índigo.
Sólo tiene que cumplir que esas características:
- Sean exclusivas: si se trata de un nuevo tipo de ser humano, entonces esas características no deben ser compartidas por otro ser humano no-índigo.
- No sean vagas o generales: como “inquieto”, “impulsivo”, “desobediente”, ya que millones de niños son así.
- Sean plausibles: que esas características no sean ilusiones como las propiedades pseudocientíficas del tipo “lee la mente” o “se comunica con el pensamiento”.
- No sean subjetivas: como “transmite paz interior”, “son más espirituales”, “genera un ambiente de tranquilidad”.

6- El “informe de la Universidad de California”
Muchos afirman que los Niños Índigo existen porque así lo demuestra una “investigación de la Universidad de California”. El informe parece perdido porque no se conoce ni el contenido, ni el título, ni el autor. ¿Usted lo tiene? Pues muéstrelo así podemos leerlo, analizar las pruebas y eventualmente consultar a los autores de la “investigación de la Universidad de California”.




7- Las pruebas del ADN y otras características físicas.
Algunos indigólogos recurren a supuestas evidencias físicas: que el ADN índigo es distinto al humano, que usan diferente los hemisferios cerebrales, que nunca se enferman, etc. ¿Usted sostiene eso? Bien, pruébelo es lo que falta para sostener como ciertas a esas afirmaciones.

8- La confirmación por analogía.
Las analogías son interesantes para incentivarnos a pensar, pero no sirven para corroborar ideas. Muchos afirman que
- los Niños Índigo existen,
- que no tienen pruebas,
- pero que será demostrado en el futuro
Para sostener esto como cierto recurren a la analogía del heliocentrismo, dicen algo así:
“muchos científicos sostenían que el Sol era el centro de nuestro sistema planetario pero no les creyeron y siglos después se demostró. Que lo mismo ocurre con los Niños Índigo, ahora no me creen pero en el futuro se demostrará.”
Este argumento es absurdo, primero por querer usar una analogía para validar un concepto. Luego porque quienes sostuvieron el sistema heliocéntrico (o cualquier caso similar) PRIMERO tuvieron las pruebas y LUEGO expresaron sus ideas. Finalmente si este argumento fuera válido, cualquier afirmación sin pruebas sería veraz, incluso las que confirman y niegan la misma idea. Como sabemos, algo no puede ser y no ser a la vez. Si usted se apoya en este argumento para sostener la existencia de los Niños Índigo, yo sostengo lo contrario por los mismos motivos.

Si sus pruebas caen en alguna de estas categorías no voy a tomar como ciertas a sus fantasías. No me haga perder el tiempo contestándole.
Si usted tiene pruebas que demuestren la existencia de los Niños Índigo, Cristal o cualquier otra secuela de los índigo, expóngala en esta bitácora. La voy a publicar, voy a borrar los artículos anteriores y me voy a convertir en el primer defensor de la existencia de estos seres.
Espero sus pruebas en un comentario de esta entrada o a quintanamdp@gmail.com